Para encontrarnos a veces es necesario perdernos

Muchas veces a lo largo de nuestras vidas sucede que nos encontramos en ese punto en el que no sabemos con certeza que hacer, donde ir o incluso quienes somos o quienes deseamos ser.

Percibimos el momento como algo totalmente confuso que muchas veces nos puede llevar de la depresión a la desesperación. Pero, como todo en la vida, resulta siendo un tema de elección, tú decides descubrir esa bendición detrás de la crisis que hoy estás viviendo.

La oportunidad, un sinónimo desconocido de crisis, es posible descubrirla  en un momento de apariencia vacía como es perder nuestro norte. Cuando me siento perdida o perdido es primordial reconocer ese momento, aceptarlo, quererlo e incluso agradecerlo.

En la práctica, este sencillo proceso, puede resultar por lo menos al inicio, no tan fácil como aparente suena. El motivo principalmente es porque desde pequeños se nos ha programado a mirar como “incorrecto” el sentirnos perdidos. Y cuando indudablemente el momento llega, no solo nos sentimos no competentes, sino culpables por no controlar lo que nos rodea, lo que pensamos y sentimos.

Las opciones a estas alturas son claras: disfrazar nuestra realidad e incluso disimular que todo se encuentra bajo control o aceptar que estamos (en mayor o menor grado) perdidos en algún momento.

Una vez que tomamos conciencia y aceptamos que estamos perdidos tenemos la emocionante oportunidad de encontrarnos nuevamente. Y encontrarse, implica mucho más de determinar cómo resolver el momento presente; implica el hacer una lectura y revisión de mis sueños, de mis valores, de mis creencias, mis hábitos y todo aquello que de alguna manera influye en aquella vida que deseo para mí.

Como resultado el perdernos puede derivar finalmente en brindarnos el espacio necesario para re configurarnos, desarrollar habilidades, impulsar talentos, aprender y crecer cada día un poco más.

Para encontrarnos a veces es necesario perdernos  😉  ¿Estás listo para encontrarte?

Malee Torrico